En un colegio como el nuestro, donde conviven niños con distintos tipos de discapacidad con niños que no tienen ninguna, haciendo con ello la vida más normalizada tanto para unos como para otros, no se nos va de la cabeza cómo puede ser el futuro para estos niños tan especiales y queridos después de terminar el cole.
Por eso os envío este vídeo donde un encargado de Starbucks contrata a un adolescente diagnosticado de autismo y desorden del movimiento, y da con la fórmula de ponerle música para que baile mientras trabaja y hacerle así fácil el trabajo.
Escrito por Mar Donate
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